[1] Traducción de Angel MaríaGaribay K., en: WESTHEIN Paul, Ideas fundamentales del arte prehispánico en México, Ed. Era, México,1972, pp. 62.
[2] Cfr. SEJOURNE Laurette, América latina. Antiguas culturas precolombinas, Historia Universal Siglo XXI, España, 1972.
[3] BAZIN Germain, El telar del arte, Argos, Barcelona, 1963.
[4] Cfr. MORDO Carlos, Las culturas verdes. Arte plumario de los pueblos de la selva, Centro Cultural Recoleta, Buenos Aires, 2005.
[5] Cfr. METRAUX André, De Suiza a Sudamérica. Etnologías de André Metraux, Museo de Etnografía de Ginebra, Ginebra, 1998.
[6] Cfr. MALRAUX André, L’Intemporel, Gallimard, París, 1976
[7] Autora de Peregrinaje de una paria. Activista política que emigró de Francia a América a mediados del siglo XIX
[8] Cfr. ROJAS MIX Miguel, América imaginaria, Ed. Lumen, Buenos Aires, 1992.
[9] BURUCUA José Emilio, “Contar la masacre”, entrevista realizada por Hugo Montero, Nómada 12, agosto de 2007.
[10] ARENDT Ana, Hombres en tiempos de oscuridad, Gedisa, Barcelona, 1992, pp.11.
[12] En las últimas décadas se han profundizado los trabajos acerca de nuestro arte; recordemos entre otros a las figuras de Alberto Rex González, Juan Schobinger, José Pérez Gollán y A. Llamazares–Martínez Sarasola. La etnografía y otras ciencias colaboran para el mejor conocimiento de aquellos temas que han inspirado a Magda Frank.
[13]CAIUBY NOVAES Sylvia. “Plaits, Gourds and jaguar skins in bororo funeral towards an understanding of the bororo notion of person”, Departamento de Antropología, Universidad de Sao Paulo, Brasil, 1986, p. 27-36.
[14] REINA Rubén, The Gift of Birds, University Museum of Archaeology and Anthropology, Uniersity of Pennsylvania, Philadelphia, 1991, pp. 29.
[15] ESCOBAR Ticio, “La belleza de los otros: arte indígena del Paraguay”, en: Las culturas verdes. Arte plumario de los pueblos de la selva, Ctro Cultural Recoleta, Bs.As., 2005, pp. 49-50.
[16] Cfr. LLAMAZARES Ana M. y MARTINEZ SARASOLA Carlos, “Reflejos de la cosmovisión originaria. Arte indígena y chamanismo en el noroeste andino prehispánico”, en: GORETTI Matteo (ed.), Tesoros precolombinos del noroeste argentino, Fundación Ceppa, 2006, pp. 63-98.
[17] Este autor de la primera bibliografía del Nuevo Mundo, titulada Epítome de la biblioteca oriental y occidental y publicada en 1629, era judío perteneciente a una familia de conversos. Nació en Valladolid, estudió en las universidades de Chuquisaca y Lima. Llega a América en 1604 siendo niño, con su padre, constantemente acosado por la Inquisición. Pasa los primeros años en Tucumán. De allí, la familia se traslada a Chuquisaca y en el año de 1612, a Lima, donde Antonio se doctoró.
[18] LÉVI-STRAUSS Claude, Tristes trópicos, Eudeba, Buenos Aires, 1970, pp. 290.
[19] Op.cit. pp. 395